8.14.2012

Eva Rubinstein


¡Hola a todos! 

Aquí estamos de vuelta después de unas vacaciones muy intensas. 

Hoy os obsequio con mi primera entrada que cree para el ¡El Paraíso Construido! 


Pasaros todos por ahí es un espacio genial.
http://lauraescribano.blogspot.com.es/

Como ya sabéis, soy diseñadora de interiores, diseñadora gráfica y también muy aficionada a la fotografía.  
Me interesa cualquier expresión de comunicación visual que transmita sentimientos con gran facilidad. 

Por ello os presento las fotografías de una gran fotógrafa: Eva Rubinstein, hija del famoso pianista Arthur Rubinstein.






La fotografía es la ciencia y el arte de obtener imágenes duraderas por la acción de la luz. Es el proceso de capturar imágenes y fijarlas en un medio material sensible a la luz. 
Esta mujer argentina, captura los espacios y movimientos con mucha feminidad, sensibilidad y fuerza expresiva. Un dato que me parece relevante sobre ella, es que estudió danza en Paris en 1939. Se traslada a Nueva York, donde sigue estudiando y llega a trabajar como bailarina. En 1953 abandona la danza por la fotografía. Aunque me parece que todas sus fotografías mantienen siempre una estrecha relación con el suave movimiento del baile y la música. 

Estas fotografías se pueden tratar precisamente como parte de una escena de un número de danza. En todas las fotografías se mantiene un sentido rectilíneo, limpio, sólido, pero de pronto pueden aparecer objetos rompiendo los “vértices”, como si quisiese contarnos algo que ha sucedido, como si fuese un cuerpo expresando sus sentimientos en danza. 
Son  fotografías con fuerza y a la vez fragilidad. 
Un movimiento suave paralizado, algo parece que ha pasado, y las fotografías son huellas de esos acontecimientos. Provocan un punto de tensión central, se llevan el protagonismo.








La iluminación natural, cuando el sol está en lo más alto, nos deja una sombra bajo los elementos que aparecen en la escena como si no hubiese nada más que esos objetos pesados en el mundo. Y los objetos se encuentran ahí queriendo salir de esa situación tan encerrada.

Podría estar contando teorías emocionales durante horas, pero la realidad es que se trata de fotografías que dejan libertad a la imaginación. 
Son fotografía que me ha transmitido muchas sensaciones diferentes cada vez que las he mirado; tristeza, fuerza, libertad, por ello creo que nunca olvidaré estas imágenes. 

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